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Jan Kroon,
Tubos y tuberías Van Leeuwen, Zwijndrecht
Van Leeuwen lleva suministrando tubos, bridas y accesorios a astilleros de los Países Bajos prácticamente desde sus inicios. También suministramos materiales a diversas empresas de tuberías que trabajan como subcontratistas en la industria naval. En este blog les hablaré sobre las necesidades específicas de nuestros clientes en este mercado y cómo respondemos a ellas.
He trabajado en el departamento comercial de Van Leeuwen durante muchos años y, con el tiempo, me especialicé en la industria marítima. Van Leeuwen se distingue por ofrecer calidad y, si bien nuestros productos se pueden adquirir en numerosas fábricas, mantenemos estándares muy altos en cuanto a la calidad del producto. Para alcanzar ese nivel de calidad, trabajamos con una Lista de Fabricantes Aprobados (LMA). Si un proveedor no cumple con nuestros requisitos de calidad, estamos obligados a no adquirir ninguno de sus productos. En otras palabras, cuando prometemos calidad, lo cumplimos, y nuestros clientes lo saben.
Los tubos, accesorios y bridas utilizados en la construcción naval suelen barnizarse para ofrecer una protección temporal contra la corrosión. Si bien es posible utilizarlos en otros proyectos, sé por experiencia que mis clientes en el sector naval prefieren materiales sin tratar. Por ello, mantenemos un stock de materiales sin tratar, especialmente para ellos. Esto les ahorra tiempo y dinero, ya que no es necesario granallar los materiales antes de la entrega; están listos para su procesamiento inmediato.
No me da reparo afirmar que contamos con una gama única de productos en stock para la industria naval. La única manera de alcanzar y mantener esta posición privilegiada en el mercado es mediante un contacto personal y frecuente con nuestros clientes. Me complace transformar sus necesidades en soluciones prácticas.
Por ejemplo, hace poco finalicé un pedido para un astillero que tuvo que realizar modificaciones en 10 barcos para cumplir con ciertas normativas. Acabamos de terminar el pedido del primer barco. Cuando empecemos a trabajar en el siguiente, reiniciaremos todo el proceso y nos centraremos en encontrar la solución óptima. Esto funciona mucho mejor que comprar los materiales para los 10 barcos a la vez, lo que reduce la flexibilidad y dificulta añadir pequeñas modificaciones posteriormente. Gracias a nuestros contactos consolidados con los proveedores de nuestra lista de proveedores autorizados (AML), podemos utilizar este flujo de trabajo.
También disponemos de miles de tamaños de tubos y otros componentes en stock, lo que nos permite realizar reparaciones imprevistas. Un barco contiene diversos materiales para múltiples aplicaciones. Por ejemplo, tuberías de combustible, de lastre y bridas, de agua de propulsión a chorro, de hélices de proa, pilotes y barandillas. Podemos suministrar tubos para todas estas piezas y contamos con una gama especial de tubos flexibles. La sala de máquinas de un barco suele ser bastante reducida y estar repleta de tuberías. Para ello, se utilizan tubos flexibles especiales según la norma BS 3059. La calidad del material de estos tubos permite doblarlos en ángulos muy cerrados, lo que los hace idóneos para espacios reducidos.
Además, hemos decidido reabastecer nuestro stock con tubos de pared gruesa sin soldadura de medidas de baja rotación. Al fin y al cabo, cuando un barco necesita reparaciones, puede tener 20 o 30 años y requerir medidas que eran comunes en aquella época. Suelen ser muy difíciles de encontrar, excepto, claro está, en nuestro almacén. Lo mismo ocurre con las bridas. Cuando un cliente necesita un tipo de brida poco común, valoramos si debemos volver a incluirla en nuestro stock. Yo también participo en este aspecto de nuestra estrategia de marketing.
He notado una creciente demanda de materiales certificados en nuestro mercado. Esto se refiere principalmente a pedidos de certificados 3.2. Asesoro a mis clientes sobre este tema casi a diario, así como sobre la actualización de certificados 3.1. Este es un servicio que también ofrecemos, en colaboración con una empresa certificadora de la elección del cliente, como Bureau Veritas, Germanischer Lloyd o cualquier otra. En estos casos, se realizan pruebas adicionales para determinar si el material cumple con los estándares adicionales requeridos. Algunas empresas nunca han tenido que lidiar con estos procedimientos. Gracias a mi experiencia y a que hago las preguntas adecuadas, puedo guiarlas en el proceso.
Este mes participaremos en la feria de la industria marítima de Gorinchem, un evento de tres días en los Países Bajos dedicado al sector de la construcción naval. Allí me reúno con muchos de mis clientes, así que, como cada año, ¡tengo muchas ganas de que llegue!
